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Colifloradas

Re-volviendo

Revolviendo, revoloteando y rebuscando entre mis pensamientos de limón y Nenuco.
Revueltos y rebienvenidos sean todos.

Top 10 muertes ridículas del rock

Siguiendo los pasos de Rob Gordon, mi adorado John Cusack, en mi adorada en Alta Fidelidad...

1. Stiv Bators: accidente en París. Paró a encenderse un cigarrillo en plena calzada y fue atropellado. Se sentó en la acera para acabar de fumar el cigarrillo y al cabo de dos horas murió.

2. Billy Murcia (de New York Dolls): por amor. Su novia trató de recuperarle para el sexo tras una noche de excesos. Le introdujo tal cantidad de café por el gaznate que lo ahogó.

3. Chet Baker: caída libre. La mítica voz se asomó a una ventana y, pum, se cayó. Era un segundo piso y no pudo sobreponerse al golpe.

4. Kirst Mccall: accidente acuático. Estaba esta amable madre de familia de vacaciones en las playas de Cancún cuando un desalmado le pasó por encima de la cabeza con su moto acuática.

5. Florence Ballard (de The Supremes): pastillas. Pero no la típica sobredosis de somníferos. Florence, la verdadera estrella de las Supremes, se murió de sobredosis de pastillas para adelgazar.

6. Sam Cooke: acribillado. En calzoncillos en un motel persiguiendo a una chica que no quería acostarse con él. Acabó en la habitación de su manager, que le pegó varios balazos (uno de ellos en sus partes nobles).

7. Steve Rock (T-Rex): atragantado. Marc Bolan murió al chocar su mini contra un árbol, y Took, el bajista y percusionista de la banda, quiso superarle y falleció al atragantarse con el hueso de una cereza.

8. Dennis Wilson (de Beach Boys): ahogado. Al parecer iba tan borracho que se ahogó en una charca de más de un metro de profundidad.

9. Mamma Cass: infarto. Al parecer provocado por su descomunal obesidad. Los rumores apuntaban a que la mataron unos sicarios, pues estaba embarazada de John Lennon.

10. Les Harvey (de Stone the Crows): electrocutado. El guitarrista murió electrocutado en medio de un solo en una actuación en el Top Rank, en Swansea, delante de sus fans.

Seguro que había alguna niña cerca con una Kodac Instamatic ;)

¿En tu cine o en el mío?

Es época de recuperaciones... de exámenes, de un curso ‘peculiar’ y sobre todo de intentar recuperar el tiempo perdido.
Para no atragantarnos lo mejor será empezar por el principio: el cine.

Confesiones de una mente peligrosa: MÁS QUE EXCELENTE. George Clooney a la dirección de una película de culto, que pasará a mi lista de ‘esto es una película’. Una dirección rompedora, innovadora, especial y muy cuidada. Y con un guión insuperable como sólo Charlie Kaufman (Cómo ser John Malkovich, Adaptation) podía hacer. Una fotografía tan buena como la dirección. Sam Rockwell merecedor de Oscar y Drew Barrymore a la altura de tan buenas actuaciones como (Riding cars with boys – Los chicos de mi vida). Especialmente recomendada si quieres salir del cine con una boca-percha :D
Zaman el hombre de los juncos: preciosa fotografía de la otra cara de la moneda en este mundo al revés. Presentada en el último Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Una historia de satén (que diría yo): tierna y desgarradora a la vez.
Harry Potter y el prisionero de Azkabán. Tal y como era de esperar: la mejor de las tres. El cambio de director ha beneficiado a esta saga en la que los actores crecen más rápido que la imaginación de los directores. Me temo que hasta aquí hemos llegado con Harry Potter. Por fin efectos especiales como una historia de estas características merece y guiños al espectador muy divertidos (cuidado con la nieve del árbol boxeador). Lo peor, los saltos tan rápidos en la historia, que se nota que han metido tijeretazo para no irse de tiempo.
Janis y John: una divertida vuelta a la época más hippylondia. Divertida, excéntrica y exagerada (sin ser excesiva)(ex,ex,ex). Buenas actuaciones y mejor vestuario, especialmente de Janis Joplin :P
Memories of murder. Thriller coreano en el que se mezclan humor negro y suspense con una dirección y una fotografía impresionantes. Para amantes del buen cine y especialmente del oriental (no va por ti, Nico XDDDDDDDD)
Por amor al arte: demasiado influenciada por su origen: el teatro. Me quedo con el final, que es lo único que salva (y vaya que si la salva) la película y con algunos puntazos en algunas frases, completamente desternillantes (atento a los pronombres...).
El día de mañana: no pierdas tu dinero ni tu tiempo en una bazofia catastrofista y patriótica. Basura, basura, basura.
Van Helsing: pueeeesssss… director de ‘La momia’, no creo que haya que decir mucho más. No es tan, tan mala... para ir a pasar un rato con tus primos, o sobrinos de 12 años...

Disfruta el séptimo arte.

Merchandising trash

El merchandising mass media es una de las nuevas bazas de la cultura popular. El pop se nutre de todos estos productos basura que son verdaderos objetos de coleccionismo y que, en ocasiones, dan un toque de distinción y clase, siempre que los miremos con ironía.
Estados Unidos es el país madre de este tipo de objetos que forman parte de su propia historia: la televisión, los parques de atracciones, la política, el cine, los alimentos... nada escapa a ser objeto de merchandising. Y es que para todo fan que se precie, nada mejor que rodearse de objetos cotidianos con las imágenes de sus ídolos. Objetos un tanto estrafalarios que son sin duda el mejor de los testimonios de la modernidad. En el museo de los horrores pop encontramos desde una colección de ropa de las gemelas Olsen, hasta una muñeca de Michael Jackson, pasando por el papel higiénico con la cara de Bin Laden...
En España últimamente OT es la reina del merchandising basura, pero recordemos las gafas de sol de Julio Iglesias, la parafernalia de Naranjito, la colonia de Jesulín de Ubrique (descatalogada), la línea de lencería de Marlene Morreau, la línea cosmética de Upa Dance... en fin, he seleccionado algunas piezas cuya posesión nos hará merecedores de un halo bizarro, moderno y kitsch... Pero sólo ‘little touches’, que el rollo pop está muy pasado, y si se abusa pareceremos Paco Clavel:

1- Libro de autoayuda: ‘Consejos de Víctor Sandoval a las mujeres para seducir a los hombres
2- Colonia OT: la fragancia favorita de las teenagers con las caras de OT2
3- Set de Felipe y Letizia: Merchandising de la boda del año.
4- Muñeco del Presidente Bush con sus frases de cabecera, botas camperas y el sello de la Casa Blanca
5- Muñeca Sabrina (de la serie). La bruja más popular y cursi de las teleseries tiene su propia muñeca.
6- Muñecas rusas con la cara de Bin Laden.

Muy especial

'Mi coco' – Los Piratas

Como una ventana que al cerrar
no ilumina el punto que ha dejado entre tinieblas.
Una sombra entre las piedras.

Así se ha quedado sin razón.
Nadie le ha explicado que no existe explicación.
Y tiene tantas dudas.
Y cómo le podría yo explicar
que la pena dura tanto como quieras tú seguir llorando.
Y aunque tú revises tu interior,
siempre queda algo que te dice que esto es para largo.

Aunque no lo tengas claro y quieras escapar.

Mi coco me dice que hoy,
mi vida entera pasará ante mis ojos.
Pediré perdón.
Con la razón estudiaría,
un libro es hoy mi corazón
Mi alma entera te daría
Si yo tuviera garantías,
de que soy yo
a quien tú esperas.

Como una mentira se perdió.
Esperó a que se callaran los rumores que decían que,
no iba a volver.

No se olvidó,
ni tampoco repitió.
Sus errores se perdieron,
como el amor

Y aunque nunca tuvo claro si había sido bueno o malo,
cómo iba a recuperar
el tiempo que se va;
nunca volverá,
y aunque tú te empeñes.

Aunque no lo tengas claro y quieras escapar

Mi coco me dice que hoy,
mi vida entera pasará ante mis ojos.
Pediré perdón.
Con la razón estudiaría,
un libro es hoy mi corazón
Mi alma entera te daría
Si yo tuviera garantías,
de que soy yo
a quien tú esperas.

Mi coco me dice que hoy,
mi vida entera pasará ante mis ojos.
Pediré perdón.
Con la razón estudiaría,
un libro es hoy mi corazón
Mi alma entera te daría
Si yo tuviera garantías,
de que soy yo
a quien tú esperas.
De que soy yo
a quien tú esperas.
De que soy yo
a quien tú esperas.

Y todo queda

Si no puedo tenerte quizá no quiera nada.
Y todo pasa.
Y hay olvido.
Si no puedo besarte, de qué me sirve besar.
Quizá me conforme con sentarme a inhalar bocanadas de vacío.
Quizá no me acuerde de ti, pero recuerdo tu nombre apedreando cada rincón de mi alma.
Y quizá detesto los finales tristes.
Me bastará saber que hay un mañana latiendo en ti.
Quizá pensar en ti.
Y todo queda.
Y duele.
Lloverá, pero estaré seca sin ti.
No habrá consuelo pero me bastarán dosis de espera.
No puedo hablarte pero te siento.
...

El final

Un minuto cuarenta y nueve segundos de belleza

'El final' AMARAL
(Una pequeña parte del mundo)


El final
Es un beso escondido detrás de un sombrero
Al final
Llega la despedida pero sigue la vida
Ven, no tengas miedo a bailar
Éste es mi vals del final
Ven, no seas tímido y ven
Ven a bailar este vals
Ven a bailar este vals
Éste es mi vals del final

El retorno de los Coen: Ladykillers

Se suele decir ‘una de cal y otra de arena’ (aunque aún me pregunto cuál es la buena y cuál la mala)
En cualquier caso, de lo que no tengo dudas es de que el viernes pasado vi una película muy, muy mala (léase ‘Cutroya’) y de que ayer vi una muy, muy buena. Es lo que tiene que los directores sean los hermanos Coen. Claro.

Y es que esta semana me toca alabanza, y de las buenas. Guión, desarrollo, actuaciones, fotografía, banda sonora y por supuestísimo dirección, a cada cual mejor. Un Tom Hanks, que dentro de que no es santo de mi devoción, por una vez en la vida transmite algo con su personaje y no hace alarde de su insipidez como en ‘Camino a la perdición’.

Una película fresca, amena, divertida e irónica en el extremo con toques de humor negro. Del bueno. En definitiva, a la altura de los Coen. ¿A la altura de ‘El gran Lebowski’? Cuéntamelo ;)

Pasen y vean...

Escuchando ‘Clocks’ – COLDPLAY

No recuerdo en qué momento fui a jugar a la feria. Tampoco recuerdo en qué momento me monté en el carrusel, desde el que los días desfilan ante mí. Y yo los veo pasar como una espectadora más. Porque yo no vivo mi vida. Alguien la vive por mí; y yo observo. Y me resigno. Y tú, junto a mí, la ves pasar también y te ríes. Pero yo no. ‘La vida ha dejado de ser un chiste para mí; no le encuentro la gracia’, como dijo Charles Chaplin en Candilejas.

Tampoco sé por qué a mí me tocó el boleto de ‘alargue su viaje unos cuántos años más’. Ni por qué sí se acaba el de la gente importante; el de la gente que significa algo en un mundo inexplicable; el de la gente que te enseña a ver la otra cara de toda perspectiva, que las cosas no son buenas ni malas, sino que podemos hacerlas mejores y mucho mejores. O incluso, si nos lo proponemos, peores.

Pero yo quiero cambiar de juego. Me gustaría que la vida fuera una pelota, para que pudiera jugar con ella, hacerla botar, rebotar, girar, estrujar, abrazar y lanzar al abismo cuando más me apeteciese, unas veces para que flotara y en algún momento para que explotara. Acabar. Me gustaría acabar algo. Definir(me). Definir el (mi) mundo. Sentenciar(me). Y los días pasan ante mí; corren y corren. Y cada día un poco más sola. Hoy infinitamente más sola.

‘Niña, que esos ojos me cuentan que te queda toda mi vida por delante’.
Hasta siempre, morenazo.

Planetizada

Tengo un problema. Lo sé. Soy adicta a Los Planetas. Es divertido cómo juegan con las drogas, siendo ellos mismos una droga en sí. Supongo que a todos nos pasará eso de ‘no puedo comprender cómo tal cosa no le puede gustar a alguien’. A mí me pasa con muy poquitas cosas: el queso, el chocolate negro, la playa y alguna cosa más, como Los Planetas. Sin embargo, hasta lo prefiero. ¿Egoísmo? Sí, puro y duro. Quiero disfrutarlos yo. Yo y /con los míos. Ya sabéis... nosotros, los raros.

'El espíritu de la navidad' (Encuentros con entidades)

En los dólmenes más grandes
que existen y que están cerca de aquí,
hay presencias misteriosas.
Habitantes de otro tiempo,
que esperan para dirigirse a ti,
revelarte los secretos.

Por la noche hay una fiesta
privada en el jardín,
han venido los monjes Shaolin,
con la pócima sagrada
que te hace sonreír.
Si te vienes es donde quiero ir.

En las copas y en las mesas
refrescos bendecidos por Alá
y manjares deliciosos.
Los espíritus del bosque
que van a descubrirte la verdad,
lo que estabas esperando.

Además de todo esto,
te puedes encontrar
a valkirias que van a disfrutar,
en los brazos del primero
que se atreva a cruzar
los umbrales de esta nueva realidad.

A la hora de la siesta,
un coro de sirenas cantará
con sitares y trompetas
las canciones más bonitas
que nadie haya podido escuchar
en los últimos milenios.

Y después cuando anochezca,
si esperas al final,
voy a darte un beso de verdad,
donde acaba el arco iris
y empieza lo demás.
Si te vienes es donde quiero estar.

Donde empieza el infinito y acaba la espiral,
si te vienes es donde quiero estar.

Cutroya

Cutre, cutre, cutre... Una película en la que la arquitectura de Troya se representa mediante templos egipcios... en fin, mal empezamos.

Pero seguimos por una pésima dirección en la que pretende suplantar las desastrosas actuaciones de sus actores, remarcando las expresiones con exagerados zooms (¡¡¡¡¡AAAAAHHHHHHHHHHH!!!!! ¿¿¿Hay algo más cutre???). Una planificación sin pies ni cabeza y unos planos... cutres. Un guión simplón, en el que se cambian hechos bastante importantes de la historia; porque una cosa es adaptar un libro, en el que con permiso del autor, puedes conceder a la película algunos retoques, y otra muy distinta adaptar la historia, que a ver a quién pides permiso...
Una fotografía... cutre, de la que se podría sacar chispas, con un color que no expresa, apagado.
¿Y la banda sonora? Una copia (cutre, cómo no) de Gladiator, con una pava dando alaridos en acciones en las que no pega ni con cola como si fueran saetas O_o (y no os perdáis la canción de los créditos, no tiene desperdicio...)

En definitiva, que me quedo con una guapísima Helen Kruger, aunque poco mística para mi gusto y un siempre buenorrísimo Brad Pitt, pelín de más de cachas para mi gusto, que llora bastante mal, para mi gusto también, pero con unas piernas... ammmmffffffff XDDDD.

En fin, por no salvar no salvo ni al caballo, que me parece pequeño... cutre.

No perdáis vuestro tiempo ni vuestro dinero en algo tan cutre.
Hay inversiones mucho mejores en cartelera como 'INTERMISSION', buena planificación, buena dirección, estupendas actuaciones y mejor argumento. Desternillante.
Como dijo Tinieblas en una ocasión: 'nos vemos en el cine; nosotros, los raros'.

Cómo cocinar una vida

Ojalá la vida fuera una receta que se pudiera modificar al gusto de cada uno.
La receta de mi vida sería así:

Ingredientes:

- un poco de sarcasmo
- un algo de ironía
- un mucho de sinceridad
- una pizca de picardía
- una gota de inocencia
- algunos granos de ternura
- kilos y kilos de sonrisas, caricias y susurros

Elaboración:

Salpimentar y meter al horno unos cuantos años, a fuego lento, pero con el gratinador para que quede crujiente. Presentarlo en un plato verde, y adornado con pequeños brotes de coliflor.
Imprescindible preparar el plato con amor. Con mucho amor.

Un homenaje a las palabras

Me gustan las palabras. Me gusta fijarme en una y jugar con ella, porque lo divertido es que encierran en sí muchas otras. Un diccionario puede ser un juego sin fin, repleto de amigas dispuestas a descubrirse ante ti, a mostrarte lo más íntimo de su ser: qué significan. Qué significa el mundo. Qué significas. Mi amiga preferida es ‘sencillez’. Me gusta qué encierra, me gusta cómo habla, me gusta cómo suena.

No hay ninguna palabra solitaria, ni tan si quiera ‘soledad’. Todas tienen una familia, unos amigos, unos conocidos. En el mundo de las palabras también hay distinción de sexos, pero es curioso porque en principio, todas juntas son femeninas, y sin embargo en particular muchas se confiesan masculinas (para que luego proclamemos que la bisexualidad está implantándose en nuestro mundo...) Cuándo nos daremos cuenta de que en las sabias palabras que nosotros mismos creamos estaba la clave. Y sólo en nuestro inútil mundo se nos ocurre utilizarlas, a ellas, para herirnos. Insultarnos. Odiarnos.

Cuánto hemos de agradecer a las palabras. Y cuánto las maltratamos. Cuántas veces habremos dicho aquello de: ‘me faltan las palabras’. Las palabras son la dimensión más sincera que existe; pese a sus dobles sentidos, son transparentes, y sólo de nosotros depende su finalidad. Ellas son puras. Nuestro mundo es hipócrita e ingrato al no saber apreciarlas, y mimarlas como se merecen.

Y quería empezar esta bitácora homenajeándolas a ellas, las únicas que hacen que todo esto sea posible. Que yo me exprese y que tú me leas, te enfades, te emociones o te quedes indiferente ante ellas. Si te enfadas, sólo puedo pedirte perdón porque no interpretes mis palabras con el mismo fin que yo. Si te emocionas, sólo puedo pedirte perdón otra vez por asaltarte de esta forma. Pero si te quedas indiferente te invito a que no pierdas tu tiempo, quien en otra ocasión recibirá un homenaje también. La vida es corta para el que se acerca a la muerte y larga para el que la saluda desde la lejanía. No es cuestión de tiempo, sino de distancia. Acércate, aléjate, pero sobre todo, no sufras de indiferencia. Siempre me reservaré palabras, al fin y al cabo, también son parte de mi intimidad. Muéstrame las tuyas siempre que quieras, pero no te olvides de guardar algunas para tu interior, nunca puede quedarse vacío.

3, 2, 1... despegamos.

Comienza la aventura de una hortaliza perdida por Internet.